Ocurre algo curioso con Phantom Blade Zero. Cada vez que lo veíamos en un tráiler nos hacía preguntarnos si realmente se ve así de bien, y si es tan frenético como parece. Y la respuesta es sí. Ya lo hemos jugado durante el Summer Game Fest y ha sido toda una sorpresa. Porque tiene algo de Souls, como ya se ha visto en los tráilers, pero sus creadores aseguran que es más bien un hack'n slash a lo Devil May Cry. Y eso nos encanta. Phantom Blade esconde mucho más de lo que parece a simple vista gracias a una jugabilidad trepidante que lleva los combates a su punto más atrevido. Solo han sido 20 minutos con él, pero nos han valido para ver el enorme potencial que tiene este juego de acción procedente de China. Te lo contamos todo a continuación.
La apuesta de China por la acción más frenética
La fórmula Souls ha sido emulada hasta la saciedad. Y cada vez que FromSoftware la ha cambiado para darnos juegazos como Bloodborne o Sekiro, han salido otros tantos juegos imitando esa misma jugada. Dicho esto, si tuviéramos que compararlo con un juego en concreto de FromSoftware la respuesta es fácil, ¿verdad? Es muy Sekiro, porque las peleas de Phantom Blade Zero son brutalmente frenéticas, y están muy centradas en los bloqueos y las esquivas. Que es justo lo que hace que los combates se vean tan impactantes. Tanto, que como decíamos al principio, solo viendo los tráilers muchas veces cuesta creer que lo que estás viendo es puro gameplay.
La demo nos enfrentaba a tres jefes, a cada cual más poderoso. Puro combate, muy poco de exploración, pero suficiente para causar impresión y dejarte las cosas muy claras respecto a lo que ofrece este brutal hack'n slash. De entrada llama la atención que los ataques se ejecutan con los botones frontales del mando, y no con los gatillos como nos había acostumbrado FromSoftware.
Las peleas de Phantom Blade Zero son brutalmente frenéticas, y están muy centradas en los bloqueos y las esquivas
Con ellos puedes encadenar combos hasta llegar al golpe de gracia, que es un movimiento francamente espectacular. En la demo íbamos equipados con dos tipos de armas: una espada más pesada y potente, y un par de dagas rápidas. Lo genial es que en mitad de un ataque puedes cambiar de arma para encadenar combos más espectaculares, aunque hay un pequeño cooldown que impide que cambies de arma muy de seguido. Además de la espada y las dagas, en la demo teníamos como armas secundarias un arco y una especie de cañón gigantesco que escupe proyectiles o llamaradas. Ambos se pueden disparar de forma rápida o mediante un ataque cargado. Lo más probable es que en la versión final de Phantom Blade veamos más armas del estilo pero aquí solo teníamos estas dos.
Emulando al mejor cine de artes marciales
Si eres aficionado a las películas de artes marciales, el género Wuxia que tantos éxitos ha dado ya, te encantará lo que viene a continuación, porque Phantom Blade nos permite usar el escenario para ejecutar los espectaculares movimientos acrobáticos de esta clase de cine. En un momento en concreto, por ejemplo, podíamos usar una columna para correr por la pared y luego caer en picado con una pirueta mortal. Aquí solo vimos este, pero parece seguro que habrá muchas otras acrobacias del estilo que podremos hacer en otros combates.
Ese espíritu tan de cine oriental se ve también muy bien representado en las esquivas y bloqueos. Si vienes de Sekiro ya te haces una buena idea de lo que te espera. Hay que perderle el miedo a los enemigos e ir de cara a por ellos, aprendiendo sus timings y contrarrestando sus ataques. Pero ojo. En Phantom Blade Zero los enemigos tienen dos ataques especiales a los que hay que responder de forma distinta. Si emiten un destello azul, son perfectos para hacer un parry. Y si lo haces bien disfrutarás de una escena espectacular que además provocará un daño tremendo. Por el contrario si el ataque es rojo tendrás que esquivar; y si lo haces en el momento preciso podrás atacar a tu rival con otro movimiento super vistoso y dañino. Todo esto, te puedes imaginar, a velocidades de vértigo porque aquí la acción es frenética a rabiar.
Los enemigos cargan con todo y no se detienen ni un segundo. Pero si juegas bien tus cartas puedes dejarles aturdidos o hasta tirarlos al suelo para rematarlos de forma segura, al romper su guardia. El resultado de todo esto son unos minutos de pura acción y rapidez totalmente estimulantes. Y cuando terminas el enfrentamiento la sensación de victoria es inexplicable. En cuanto a la dificultad, lo cierto es que es uno de los puntos que más dudas me han generado. En apenas toda la demo morimos 2 veces y no fui capaz de atribuirlo a si el juego es más sencillo de lo que se esperaba o a que después de haber jugado tanto a Sekiro o a Lies of P, de forma intuitiva ya sabes lo que te espera.
Hablamos de una aventura de acción que puede llevarnos entre 30 y 40 horas, con abundantes misiones secundarias
Como la demo era tan corta me he quedado con ganas de saber más sobre la historia, o comprobar también qué tal funciona la exploración de su sugerente mundo; cómo funcionan las misiones y qué clase de desafíos podemos encontrar aparte de las frenéticas batallas contra estas criaturas infernales. Porque hablamos de una aventura de acción que puede llevarnos entre 30 y 40 horas, con abundantes misiones secundarias incluyendo el contenido endgame y hasta mazmorras multijugador.
Por todo ello, esta primera toma de contacto con Phantom Blade me hace esperar grandes cosas de este juego que sigue sin una fecha de lanzamiento concreta, aunque sí se sabe que llegará a PC y PS5 a lo largo de 2024. Recientemente sus autores también dejaron caer que no descartan llevar Phantom Blade a Xbox, aunque por ahora no hay nada oficial. Pero si te gustan mucho estas experiencias de acción desafiante y tienes los reflejos preparados, no lo pierdas de vista.
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