¿Cómo es posible que el personaje favorito de la saga Final Fantasy en Japón sea uno de su MMORPG? Más de uno aún no sale de su asombro pero tiene una explicación

Si sueles leer manga, seguro que ya estás acostumbrado a este tipo de encuestas. Es muy común que toda producción japonesa le pregunte a sus lectores o jugadores a qué personajes prefieren. Viene muy bien para saber de quién hacer peluches, spin-offs a quién dedicarle un arco argumental propio. Hace unos días se hizo una de estas sobre Final Fantasy. Cualquiera hubiera pensado que de primero saldría Cloud, Tifa, Aerith, Vivi o Tidus, pero no. El ganador fue Emet-Selch, personaje de Final Fantasy XIV.

Y este no fue el único del MMORPG de Square-Enix que se prodigó en la lista, también se pasearon por ella G’raha Tia y Haurchefant. En total, los dos videojuegos que más representantes tuvieron fueron este y Final Fantasy VII; de Final Fantasy VI y Final Fantasy VIII no hubo ni un representante… Ni tampoco de mi querido Final Fantasy XV; siempre en mi corazón.

Esta encuesta dice mucho del estado actual de la franquicia. Es normal que haya tantos nombres de Final Fantasy VII, el primer capítulo del remake funcionó muy bien, estamos todos llorando otra vez con Zack por culpa de Reunion y se nos hace la boca agua con Ever Crisis, pero, ¿cómo es posible que un MMORPG iguale y hasta supere a la mítica séptima entrega en popularidad gracias a sus personajes? Pues porque Final Fantasy XIV no es un JRPG más. La culpa la tienen Naoki Yoshida y Natsuko Ishikawa, director del juego y escritora de la historia.

Final Fantasy XIV, de comienzo desastroso a salvador de Final Fantasy

Muchos ya conocéis a Yoshida. Es el productor de Final Fantasy XVI, pero fue el responsable de construir lo que es Final Fantasy XIV a día de hoy. También estuvo detrás de sus expansiones, de A Realm Reborn, Heavensward, Stormblood y Shadowbringers. Pero lo mágico de estas expansiones, más allá de lo jugable, radica en sus textos, en su historia y en lo que le ocurría a sus personajes. Y eso fue obra de una desconocida para muchos: Ishikawa.

Ella fue la responsable de la historia de estas continuaciones y de Endwalker, y los que no han pasado por este MMORPG no la conocen porque no se ha dedicado, todavía, a ningún videojuego para un solo jugador de la franquicia. Para que entendáis su importancia, es fácil encontrar por reddit, redes sociales o cualquier foro una afirmación tajante: que ella ha escrito una de las mejores historias de la saga con Shadowbringers. Por cierto, Ishikawa no está participando en Final Fantasy XVI. A mí me gusta pensar que es porque han preferido concentrar sus esfuerzos en Final Fantasy XVII.

Dicho esto, ¿quién demonios es Emet-Selch? Este personaje apareció en una de las expansiones menos brillantes del juego, en Stormblood, pero acabó destacando en Shadowbringers como villano principal. Lo interesante de Emet-Selch es su auténtica identidad y su implicación en la creación de los cimientos del lore, así como el misterio que rodea a cada una de sus apariciones. Es un ser con un aire a lo Xehanort en Kingdom Hearts solo que mejor escrito; siempre está ahí, maquinando incluso aunque no se le vea directamente.

Mucho ojo a Naoki Ishikawa. Ella y Yoshida tienen las llaves del futuro de Final Fantasy

Lo increíble es que no solo en Final Fantasy XIV se han dado cita estas dos figuras, es que incluso también ha tenido presencia el trabajo de Yasumi Matsuno. El creador de Vagrant Story está representado en el juego con una cadena de misiones que en su momento se descartaron del juego. Es decir, poco a poco, decisión tras decisión, se ha ido fraguando en este MMORPG el futuro de la saga, uno que en 2023 conoceremos los que disfrutamos más de la experiencia para un solo jugador.

Final Fantasy XVI.

Es por esto que no es nada alocado que este capítulo haya tenido tanto peso en las encuestas de popularidad. Yo mismo he disfrutado mucho de Final Fantasy XV; algo menos de Final Fantasy XIII, pero me gustaron sus expansiones. Pero, pese a ello, reconozco que espero mucho más nivel de esta saga. Un nivel que sí está en Final Fantasy XIV, con personajes bien escritos, buenas historias y un mundo inmenso que explorar. De hecho, mientras escribo estas líneas estoy trasteando con mi Steam Deck, a ver qué tal se comporta el MMORPG en ella.

Por todo esto, a mí no me ha sorprendido nada ver a Emet-Selch tan arriba. Como he dicho, me parece una clarísima representación del estado de la saga en 2022. Lo más loco ha sido encontrarme a Wakka en el puesto número 2. No soporto a Wakka, la verdad, y daba por hecho que nadie lo hacía. Intentando comprender cómo ha sido esto posible, he descubierto que se rumorea que el jugador de Blitzball ha subido tanto por culpa de una canción meme sobre su amor oculto por Tidus. A continuación, la hermosa tonadilla en vídeo. Juzgad vosotros mismos.

El primer puesto de Emet-Selch nos adelanta un potente Final Fantasy XVI y XVII

Viéndolo en positivo, esta encuesta refuerza mis esperanzas en el futuro de Final Fantasy. Y creo que también debería entenderlo así cualquier aficionado de la saga, le guste o no el MMORPG en cuestión. ¿El personaje que más ha gustado proviene de un juego dirigido por el productor de la nueva entrega? Pues genial. ¿Y la escritora de ese juego podría estar en Final Fantasy XVII? Pues oye, ojalá. Final Fantasy necesita renovación, huir de una vez de las historias de siempre pero sabiendo recuperar lo que siempre la ha hecho magnífica.

Sus juegos para un solo jugador necesitan a personajes como Emet-Selch, porque son columnas vertebrales de un lore bien formado, rico y profundo, y también a otros como G’raha Tia y Haurchefant, que también destacan por sus implicaciones en la construcción del trasfondo del juego. Así que, por lo general, y aunque no esté mi querido Cyan Garamonde entre los elegidos, me ha gustado esta encuesta. Habla de un prometedor futuro para Final Fantasy… Y de lo memeable que es Wakka.