En mayor o menor medida todos hemos estado ahí. Entras en un nuevo trabajo, nadie te explica nada, te empiezan a pedir cosas que no tienen nada que ver con lo que debía ser tu faena y, por aquello de redondear la jugada, tu jefe resulta ser un descendiente de Belcebú al que sólo le falta sacar ascuas por la boca. Puede que algunos llegasen a tolerar esos ambientes tóxicos, pero la Generación Z tiene muy claro cómo responder a ello.
La historia de Calli Nguyen compartida por nuestros compañeros de Genbeta es la viva muestra de cómo las nuevas generaciones están para pocas tonterías y, aunque fue su jefa la que terminó despidiéndola, la renuncia no habría tardado mucho más en materializarse porque la salud mental y el respeto deben ser siempre una prioridad: "la Generación Z sabe que hay un lugar mejor para nosotros si no conseguimos lo que queremos en un trabajo".
Ambientes tóxicos que se vuelven insoportables
Tal y como relataba en Business Insider, tras tres días después de empezar el trabajo, tras tener que lidiar con una discusión que terminó obligándola a tomarse un descanso para tranquilizarse pese a estar prohibiéndolo su jefe, fue despedida. Dice que las red flag estaban ahí desde el principio, pero la ilusión por el trabajo hizo que hiciese caso omiso a las evidentes señales que había presenciado hasta el momento.
La primera de ellas fueron las reseñas de Glassdoor en las que se dejaba patente el trato vejatorio que había hacia los empleados. La segunda, cómo los clientes denunciaban la situación en las reseñas de Google. La tercera, que tras entrar con la idea de ser manager de oficina terminase haciendo labores de marketing digital.
Tras una bronca en la que su jefa le demandaba información sobre distintos productos de una industria en la que llevaba apenas tres días, llegó la debacle. Tras pedirle por favor que debía salir para tomar aire y negársele la posibilidad, lo hizo igualmente y fue despedida
"Para ser justos, yo quería renunciar, así que ella me despidió antes de que yo me despidiera de ella. Cuando me acerqué al mostrador de recepción, miré al manager y al instructor y les dije que me habían despedido. A pesar de todo el drama, el manager me ofreció una carta de recomendación".
Rápidamente volvió a encontrar un puesto, esta vez mediante teletrabajo, lo que según ella demuestra que, en cierto sentido, su generación tiene razón al querer huir de estos ambientes tóxicos. Cree que siempre habrá otro sitio al que acudir en el que se huya de este tipo de actitudes.
"Algunos trabajadores de la Generación Z pueden ser vagos e irrespetuosos, y he visto TikToks que afirman que también somos groseros. Sin embargo, al igual que todos los demás, queremos que nuestros jefes nos valoren, disfrutar de nuestros trabajos y entorno laboral, y recibir una capacitación adecuada para poder prosperar".
Si el 73% de los jóvenes de la Generación Z prefieren trabajos que resulten más flexibles es precisamente por huir de ambientes que puedan enquistarse. Con la salud física y mental como principal prioridad, ni siquiera la posibilidad de ascender por la vía rápida es excusa suficiente para lidiar con este tipo de problemas.
Imagen | Valanchik en Midjourney
En 3DJuegos | La historia de la monja española que escapó de un convento, triunfó en la guerra, y un Rey y un Papa la condecoraron
Ver 3 comentarios