En una de las calles de este Londres victoriano hay dos establecimientos completamente opcionales que, sin embargo, capturan perfectamente el espíritu de An English Haunting: un teatro donde se proyecta "Évocation Spirite" de George Méliès y una librería llamada Falk's Horror Books. No preguntes por clásicos de la literatura universal si no quieres hacer enfadar al librero. Aquí solo se vende el terror romántico y gótico que a finales del siglo diecinueve fue cada vez más popular. Este estilo se caracterizaba por personajes cuya fascinación por lo oculto y sobrenatural solía terminar en tragedia. En cierto modo, mucha de la literatura del género nos advierte que tengamos cuidado con nuestra propia curiosidad, inspirada quizá por el avance científico y tecnológico irrefrenable de la época.
Así, aunque a nuestro protagonista Patrick Moore se le encomienda una tarea imposible, demostrar la existencia del Más Allá en tan solo tres días para así salvar su departamento Investigaciones Metapsíquicas en la Universidad, este MacGuffin no es tan importante, ya que el verdadero leitmotiv de la obra es el mismo que las obras en las que se inspira: la inevitable curiosidad y la fascinación por aquello que quizá no deberíamos desvelar.
Por tanto, An English Haunting es una historia de fantasmas en forma de aventura gráfica. Sus puzles sirven a la historia no solo para que vayamos avanzando poco a poco en ella, sino para conocer mejor el contexto de la época ante la fiebre espiritista que se había desatado en el país tras el origen francés del movimiento a manos de Allan Kardec. Así se representa el impacto desde todas sus vertientes: la escéptica y científica, las primeras asociaciones que se reunían para realizar sesiones espiritistas y, por supuesto, las oportunidades lucrativas que se presentaban en forma de espectáculos de luces y efectos especiales. Por eso era importante introducir la figura de Méliès, ya que la innovación en los efectos especiales cinematográficos causó un furor en la época, sorprendiendo a un público que veía cómo la magia del montaje y las superposiciones creaban fantasmas en la pantalla.
Hombre de ciencia, hombre de fe
Por ello, recorrer An English Haunting no es solo "jugar a una aventura gráfica"; es asistir a un marco de la época, a un pulso entre la ciencia y el misticismo que marcó el arranque del siglo veinte y dividió al mundo en aquellos que tenían una necesidad imperante de creer en cualquier cosa y los que harían cualquier cosa por saber la verdad detrás de los misterios del universo. Por ello, la figura de un profesor de universidad (un hombre de ciencia) que estudia fenómenos paranormales es el equilibrio adecuado.
A través de los ojos de Patrick Moore vemos muchas de las situaciones macabras que acontecieron en la época, como el extraño fenómeno de fotografiar a los fallecidos como forma de lidiar con la muerte en una época donde esta imperaba por doquier. También conoceremos de primera mano a personajes reales de la época. Florence Cook es una de las figuras más representativas: una médium que organizaba sesiones en las que se manifestaba un espíritu con nombre, apellido y ectoplasma, Katie King. Los escarceos del escritor Sir Arthur Conan Doyle con el ocultismo le sirven también al juego para convertirlo en cierto momento en un personaje jugable y llevarnos a otros lugares y otras realidades del lado más oscuro de esta Londres victoriana.
An English Haunting, por muy inglés que sea su ambientación, tiene alma nacional. José María Meléndez pertenece a esta nueva generación de creadores en solitario que han recogido el testigo de la aventura gráfica y han superado la fase de homenaje directo al género para emprender el camino autoral. Por ello, cuando juego a An English Haunting, no veo la imitación de ningún otro juego. Sí, claro que puedes percibir, por ejemplo, las influencias de Los Archivos Secretos de Sherlock Holmes: El Caso del Escalpelo Mellado, pero Meléndez tiene su propia estructura para saber cuándo el jugador quiere puzles y cuándo quiere centrarse en la historia. Así, una vez que An English Haunting te ha cautivado, afloja el puño de los puzles, gana en ritmo y se centra casi por completo en el misterio.
Meléndez se vuelve a servir del incombustible Adventure Game Studio, probablemente la herramienta para la creación de aventuras gráficas menos potente y, sin embargo, más utilizada y querida por creadores y comunidad. Le basta y le sobra para lo que pretende transmitir y se nota la evolución desde su anterior obra, Nightmare Frames, en todas sus facetas. Los puzles parecen más concentrados en mostrarnos el marco de la época. La cantidad de efectos y juegos de luces transmiten perfectamente esa atmósfera brumosa y oscura que al menos impera en el imaginario colectivo de la época. También se nota la evolución en el píxel, en la composición y el color de los escenarios, la forma en la que inciden las luces y los reflejos en el escenario y mi elemento favorito: la vida que impregna a las calles de Londres. Donde otras aventuras se sienten solitarias, convirtiendo a veces zonas que deberían ser pobladas en espacios liminales, An English Haunting no escatima en mostrar la vida de Londres en forma de viandantes, carros y caballos. Todo acompasado con una mezcla entre banda sonora original y canciones de la época.
Con todo ello, An English Haunting demuestra que la aventura gráfica siempre ha sido una gran forma de explorar pequeños universos llenos de detalles y aprender de ellos, sobre todo cuando el puzle se diseña como conductor de la narración, y no se desconecta de ella. A veces es difícil conseguir todo esto con solo puzles de inventario y de diálogo, pero el resultado es exactamente el que se pretende: una historia de fantasmas que sigue los patrones que los autores clásicos. Escribir sobre lo invisible, movido por una imperiosa curiosidad por lo oculto hasta correr el riesgo de encontrar exactamente lo que estás buscando.
An English Haunting es una magnífica aventura gráfica de terror que cumple exactamente lo que promete, rindiendo homenajes a los autores clásicos del género mientras que busca su propio rumbo como aventura, presentando una Londres victoriana llena de vida y personajes singulares que nos ayudan a entender mejor la fiebre espiritista que inundó el país a finales del siglo diecinueve. Sus puzles no buscan ser los más desafiantes, sino adecuarse a la historia de fantasmas que pretende contar hasta llegar a su apoteósica conclusión.
Comprar An English Haunting- Es obra de una sola persona, José María Meléndez, que publicó hace dos años Nightmare Frames.
- Cuenta con personajes reales de la sociedad londinense de la época, como Arthur Conan Doyle, Houdini o Florence Cook.
- Utiliza la fórmula clásica del point and click, pero en la que los puzles sirven casi por completo a la historia.
- Se inspira en los cuentos de terror gótico de la época.
- Una interfaz sencilla junto a un pixel art muy logrado que logra transmitir perfectamente la atmósfera.
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