Hace mucho tiempo que hemos normalizado la idea de que personalidades del cine o del deporte sean también grandes aficionados a los videojuegos. Sin embargo, lo de Luka Doncic todavía nos llama la atención. Resulta que además de ser una de las grandes estrellas del baloncesto a nivel planetario, el jugador de los Dallas Mavericks también está entre los mejores del mundo de Overwatch 2. A través de sus redes sociales, ha revelado que ha sido capaz de alcanzar el "Top 500" jugando en la posición de tanque.
Lo cierto es que, si bien es llamativo, quienes siguiesen de cerca a Luka Doncic a lo largo de los últimos años podían esperar que alcanzase los rangos más altos del videojuego de Blizzard. Hubo una ocasión en la que apareció en la retransmisión en directo de 'm0xyy', un creador de contenido especializado en el shooter que juega en los rangos más elevados. El resultado de este encuentro fue sorprendente: mientras el creador de contenido alucinaba por haber encontrado a un candidato a MVP de la NBA en el videojuego, este le decía que era fan de sus streamings.
Luka Doncic, que publicó la imagen de su logro en Instagram, lo ha hecho después de saber que ha quedado tercero en la carrera por el premio a jugador de la temporada de la NBA. El MVP ha sido Nikola Jokic, quien también ha reconocido públicamente su gusto por los videojuegos. Habitualmente juega a League of Legends. Se desconoce en qué rango está, pero se le ha visto utilizar 'merchandising' de algunos de los streamers más conocidos de Norteamérica durante algunas conferencias de prensa. También que sus campeones favoritos son Illaoi y Urgot.
Las estrellas del futbol también juegan a videojuegos
Cambiando de deporte, muchos futbolistas de élite están en una situación similar. Haaland es un apasionado de Minecraft que también adora Clash of Clans, Neymar juega a Counter-Strike 2 y se codea con profesionales del shooter de Valve y multitud de futbolistas profesionales están vinculados de un modo u otro con los esports. Hace ya mucho tiempo que los videojuegos han superado esa barrera y, cuando lo pensamos, es fácil entender por qué: la mayoría de deportistas que hoy triunfan se criaron en una época en la que este entretenimiento era extraordinariamente popular. Lo raro sería que no jugasen.
Imagen gracias a Erik Drost, vía Wikimedia Commons.
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