Ha cumplido mis expectativas. Y no es poco decir, menos considerando que he estado esperando este juego desde que se anunció hace 8 años. No todos los videojuegos pueden presumir de esto, pero Pikmin 4 se las ingenia para resultar lo suficientemente innovador con respecto a anteriores entregas. Sigue manteniendo todo aquello que te gustó de otros títulos, pero añade una tonelada de contenidos y capas jugables que transforman la experiencia. Es, sin duda, toda una demostración de cómo hacer bien una secuela.
El epicentro de todas estas incorporaciones es Ochin, el perro que nos acompaña en esta aventura, pero también hay una nueva raza de pikmin, las batallas Dandori, las expediciones nocturnas y una serie de niveles que ocurren en entornos cavernosos. Son novedades estructurales con capacidad para transformar nuestra concepción sobre lo que es un juego de la saga Pikmin, dando lugar al que es -sin lugar a dudas para mí- el mejor juego de la franquicia. Pero de lejos, además. ¿Tiene desaciertos? Por supuesto, y te los contaré a continuación, pero que te quede claro: son infinitamente más numerosas sus virtudes.
El mejor juego de la saga Pikmin
Lo interesante es contarte ahora por qué he sentido encontrarme ante el mejor juego de la saga Pikmin. En primer lugar, por algo que parece invisible mientras juegas: la introducción de una tonelada de mejoras a la experiencia de juego original. En mi caso en particular, que venía de jugar a la colección de Pikmin 1 + Pikmin 2 he detectado un énfasis inusitado en lograr que la interacción con nuestras criaturas sea más satisfactoria que nunca. Llamarlas, enviarlas a trabajar o hacer que luchen es una experiencia muy intuitiva, con un control depurado y sin el más mínimo ápice de frustración.
Es posible controlar a Ochin de forma independiente para realizar ciertas tareas
Pero es que lo mejor viene por parte de un inventario de artilugios i+D que puedes comprar mientras progresas en tu partida, y que no hacen más que ir añadiendo más y más satisfacciones a tu experiencia de juego. Hay un cuerno de embestida que envía en tropa a los pikmin hacia el objetivo que elijas, un tesorímetro que te ayuda a encontrar tesoros cercanos, unas velocibotas para explorar más en menos tiempo… y hasta un aparato que te dice cuántas de tus criaturitas están sin hacer nada.
Posees un dron explorador que te permite echar un vistazo a cualquier zona del escenario y también se incluye algo que me parece un inventazo: la posibilidad de llamar a esos pikmin desperdigados por el mapa (por lo que sea) y que así no acaben el día devorados por los enemigos. Hay muchos dramas con los que he estado conviviendo durante todos estos años en los juegos de Pikmin, y lo bueno de esta entrega es que acaba con casi todos ellos. Por ejemplo, si pierdes a 20 unidades de repente, puedes retroceder en el tiempo y tratar de enmendar tan fatídico error.
Cuando se acabe el tiempo, debes correr de regreso a tu nave
Ya sé lo que me dirás ahora, que eso afecta a la dificultad. Puede ser. No te lo niego, pero todo depende de cómo lo veas. Pikmin 1 era casi un juego de supervivencia y generaba estrés ir siempre contrarreloj. Pikmin 2 redujo esa sensación quitando el límite de días, mientras que Pikmin 3 ya era literalmente otra cosa. Ahora, con Pikmin 4 se sigue la evolución lógica de la saga, haciendo una aventura con un mejor equilibrio: sigue teniendo su reto, pero lo que no quiere de ninguna manera es que estés permanentemente alerta.
Por ejemplo, tienes varias zonas a explorar, y en cada una de ellas puedes permanecer una buena cantidad de minutos antes de que anochezca. No obstante, aunque las posibilidades de exploración en cada región sean elevadas, la miga está en encontrar las simas cavernosas (¡y dentro de ellas el tiempo discurre mucho más lento!). Es decir, se te sigue apremiando, pero ya no es esa soga que te apretaba en los primeros juegos. Aquí puedes tomarte tu tiempo para cumplir las tareas que se te proponen, e incluso esforzarte por conseguir todos los tesoros posibles, que por cierto son numerosos.
En las simas cavernosas el tiempo pasa más lento, así que menos estrés
Esto se relaciona con una doble estructura de juego. Por una parte, estos objetos te dan lustronio para desbloquear nuevas regiones de juego. Por otro lado, dentro de cada región hay un número determinado de exploradores a los que debes rescatar para completar la aventura. Es, por así decirlo, un juego más complejo en su concepto, y por tanto con variedad de objetivos a completar. El enfoque me ha encantado, principalmente porque esto viene acompañado de mayor diversión, pero también de más horas de juego que en anteriores entregas. En total, mi partida duró cerca de 18-20 horas, lo cual está sensacional.
Pero por encima de todo destaco que es un juego con un montón de propuestas. No me he aburrido nunca. Las simas cavernosas proponen puzles y enemigos (incluidos jefes) que dependen del uso de determinados pikmin. Es, con sus lógicas diferencias, como llevar las mazmorras de Zelda a un juego de Pikmin. No exagero. Algunos de estos recorridos son fugaces, pero otros están realmente elaborados, y te proporcionan algunos de los momentos más destacados de Pikmin 4.
Las batallas Dandori proponen conseguir más puntos que tu oponente
Por otro lado, están las batallas Dandori. Se trata de eventos especiales en que se te pide recoger más tesoros y derrotar a mayor cantidad de enemigos que el equipo contrario. Todo dentro de un límite de tiempo, tratando de optimizar al máximo la gestión de tus pikmin. Es uno de los eventos estrella del videojuego, una maravilla. Hasta hay una modalidad para dos jugadores por si quieres recrearte en el estrés que genera, y que recuerda claramente a los Pikmin clásicos.
Es lo que te decía, que se mantiene esa esencia, pero no como dinámica central, sino orientada a determinadas experiencias como las expediciones nocturnas. Es el otro gran bastión de Pikmin 4, al proponer resistir a una serie de oleadas de enemigos en la oscuridad de la noche (territorio hasta ahora inexplorado en la licencia). ¿Con qué finalidad? Obtener un néctar especial que voy a mantener el misterio de su función. Me interesa más que sepas que aquí controlas solamente a los pikmin luminosos, que pueden combinarse para paralizar el avance de unos enemigos más fuertes de lo habitual.
Las expediciones nocturnas son crecientes en desafío, y pueden estresar mucho
Acabo de darme cuenta de que llevo una buena parrafada, pero es que hay muchísimas cosas que contar sobre el juego, ¡y aún no he hablado de Ochin! Este simpático perro se une al principio de la aventura y nos permite hacer algo tan básico como nadar o saltar para superar obstáculos. Ya solo esto elimina barreras de exploración (antes insalvables) y otorga una renovada sensación de libertad en la saga Pikmin. Pero este perrete además puede atacar a los enemigos, llevar a los pikmin a cuestas y cargar objetos de elevado peso. Es un todoterreno que eleva la sensación de accesibilidad que os comentaba al principio del artículo.
Todo en Pikmin 4 está, de hecho, construido en torno al objetivo de mejorar la experiencia de juego, de hacerla más satisfactoria que nunca. En los desafíos Dandori, puedes hasta pedir una ayudita por si te quedas atascado. Nintendo quiere que juegue la mayor cantidad de usuarios posible, pero sin renunciar a las claves identitarias de la saga Pikmin. ¡Formidable! Pero ahora vayamos con los aspectos que menos me han gustado, que también los tiene.
Una dinámica central es recoger objetos para obtener lustronio y acceder a nuevas zonas
Y voy a empezar fuerte. No hay cooperativo. Bueno, sí, un modo para dos que en realidad consiste en que el segundo jugador maneja una retícula de disparo. Nada más. Por eso digo que para mí no hay coop. No sé por qué no se han seguido los pasos de Pikmin 3 Deluxe, con un modo historia a pantalla dividida. He de reconocer que la decepción en mi caso ha sido mayúscula, porque me habría encantado compartir la aventura con algún amigo o familiar.
En otro orden de cuestiones, el apartado audiovisual está muy cuidado, con una fusión entre fotorrealismo (entornos) y el tono cartoon (personajes) tan propio de Pikmin. Está bien, muy bien de hecho, pero creo que falta más calidad en ciertas partes del juego. Es como si hubiese muchos claroscuros: cosas que están muy bien terminadas y otras que no lo están tanto. No es algo exagerado, pero en un juego de este nivel esperaba más. En cualquier caso, va a ser uno de esos juegos que mejorarán cuando se rescaten en la próxima consola de nintendo, de esto no me queda la menor duda.
Artísticamente es bonito, pero podría haber estado mejor resuelto en lo gráfico
Y nada más. Como veis, pocas críticas. El juego tiene más contenidos que nunca, una gran variedad de experiencias, toneladas de novedades… y en definitiva supone más que el típico "más y mejor" del que habitualmente os suelo hablar. Por esto sí que merece la pena esperar 8 años o los que sean. Es desde hoy el mejor juego de la saga Pikmin y por nada del mundo os lo podéis perder a poco que os guste la licencia o, simplemente, su llamativa propuesta.
Pikmin 4 es todo lo que se podía esperar a una secuela por la que hemos estado esperando un montón de año. La saga ideada por Shigeru Miyamoto se renueva por dentro y por fuera con una cantidad de novedades apabullante, un mejor ritmo de juego, más variedad que nunca y un diseño jugable al que no se le puede sacar ninguna pega. Es el juego de Pikmin más completo y variado de la serie, y a pesar de no contar con un cooperativo competente, es un imprescindible para los fans de la serie o simplemente aquellos que se sientan atraídos por su propuesta de calidad.
Comprar Pikmin 4- El juego de Pikmin más variado y con mayor cantidad de contenidos, y por tanto también el más longevo y satisfactorio.
- La incorporación de Ochin añade un plano de libertad y versatilidad a la jugabilidad original de Pikmin.
- Las expediciones nocturnas y los desafíos Dandori son interesasntes y recuperan el estrés clásico de la saga.
- Incluye un modo para dos jugadores, pero no se puede considerar cooperativo y es bastante decepcionante.
- Muy competente en el apartado audiovisual, aunque hay aspectos con algunos altibajos y se esperaba más de una producción así.
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