Dentro del vasto universo de atractivos personajes de Marvel Comics, hay una ausencia notable cuando se trata de videojuegos: Los 4 Fantásticos. A pesar de ser una de las piedras angulares narrativas de Marvel y una de las IPs más importantes de la editorial, los 4 Fantásticos solo han protagonizado dos videojuegos, y para colmo, fueron bastante mediocres. Ni siquiera en la era dorada de los videojuegos de los años 80 lograron tener su propio título. Lo más cercano fue un juego de 1985, Questprobe, que contaba solo con la presencia del 50% del cuarteto, la Antorcha Humana y La Cosa.
En 1997 Los 4F tuvieron una oportunidad en PlayStation de la mano de Probe Entertainment y Acclaim Entertainment. Un título del que es fácil olvidarse, como bien nos recuerda nuestro lector David Gómez, y que tenía un planteamiento de avence en scroll lateral al estilo Final Fight. Según Greg Fischbach, presidente y CEO del editor Acclaim Entertainment, Acclaim se dio cuenta durante el desarrollo de este juego no estaba saliendo bien, pero las obligaciones contractuales les obligaron a continuar con el desarrollo y la publicación del juego. Y se nota: Fantastic Four recibió críticas abrumadoramente negativas en los medios especializados. Pero al menos hacía un resumen interesante de la mitología y personajes de los cómics. Me pregunto si la ilustración de Carlos Pacheco para la portada compensaba sufrir su machacona banda sonora.
Tras esta olvidable aventura, tal vez no resulte extraño que con la excepción de los videojuegos de las película de 2005 y 2007, los 4F no hayan disfrutado de más protagonismo en el mundo de los videojuegos, aparte de algunas apariciones en juegos como los Ultimate Alliance o como guiños en títulos centrados en otros héroes de la editorial, como en Spider-Man 2.
Como fan de Marvel y de Los 4 Fantásticos en particular, esta situación es decepcionante
Que desde entonces las únicas apariciones de Los 4 Fantásticos como héroes titulares de sus propios videojuegos estén estrechamente vinculadas las campañas promocionales de dos películas es más que comprensible, aunque decepcionante. El primero de ellos, lanzado en 2005, acompañaba a la película del mismo año. Desarrollado por 7 Studios y publicado por Activision, el juego fue concebido principalmente, como solía pasar hace unos años, para tratar de colocar el videojuego a aquellos espectadores más jóvenes entusiasmados con la película. Resultaron no ser demasiados, unos 320.000 según las copias vendidas del juego que reconoce Wikipedia. Los jugadores asumían el control de los miembros del equipo de superhéroes y luchaban contra hordas de enemigos utilizando combos y ataques especiales. A pesar de contar con las voces de los actores que interpretaron a los personajes en la película, como Ioan Gruffudd y Jessica Alba, el juego recibió críticas mixtas por parte de los medios especializados destacando su falta de originalidad y su nivel técnico más bien justito.
A la segunda tampoco va la vencida, ni mucho menos
Como ocurrió con la película, a alguien se le ocurrió que una secuela era buena idea y así el mundo pudo disfrutar de Los 4 Fantásticos y Silver Surfer, lanzado en 2007 y repitiendo la jugada de servir de complemento a la película de mismo nombre. El juego era algo más pretencioso que el anterior y ofrecía algunas novedades jugables interesantes, pero se quedaba muy, pero que muy lejos de las propuestas de otros grandes videojuegos lanzados aquel año como Bioshock, Assassin's Creed o God of War II. En resumen, otro previsible descalabro.
Como fan de Marvel y de Los 4 Fantásticos en particular, es decepcionante ver que las principales apariciones de estos personajes en los videojuegos sean tan mediocres. A pesar de todo el potencial de la licencia, estos dos juegos desperdiciaron la oportunidad de explorar el rico universo de los cómics y ofrecer una experiencia más satisfactoria para los fans. En lo personal, me gustaba especialmente cuando estos dos títulos se olvidaban de la películas a la que hacían referencia y se empapaban de la mitología de los cómics presentando a villanos como Diablo o El Hombre Topo. Es una pena que estos dos juegos, incluso aceptando sus limitaciones (de todo tipo), dejaran pasar la oportunidad de acompañar al grupo en aventuras mucho más cósmicas y más centradas en la ciencia ficción y menos en la acción pura y dura.
Especialmente si pone en escena a un personaje tan interesante como Annihilus, gobernante de la Zona Negativa, un universo de antimateria descubierto por Reed Richards en los cómics, o a Terrax y el Superkrull, viejos conocido de los lectores de Marvel. Y es que los cómics originales de los Cuatro Fantásticos tienen elementos suficientes como para poder crear un videojuego que no se basara solo en pulsar botones a lo loco y tirar para adelante entre cinemáticas. Pero bueno, hay que aceptar que eran otros tiempos, que Marvel no era el icono de la cultura pop que es ahora (aunque estaba a punto de empezar a serlo) y que la industria del videojuego ha cambiado también bastante en las últimas décadas.
A lo mejor sus fans tenemos que esperar al estreno de la próxima (y prometedora) película del cuarteto que introducirá a Los Cuatro Fantástico en la continuidad de Marvel Studios para que la licencia se revitalice y podamos disfrutar de un juego tan divertido y sorprendente como el excepcional Guardianes de la Galaxia.
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