Se repite en todas y cada una de las presentaciones de Baldur's Gate 3. Quieren enseñarte algo. Van con una idea clara de lo que van a hacer y de repente todo falla, el plan se derrumba, y entonces toca improvisar. Es justo en estos momentos donde más brilla el nuevo RPG de fantasía de Larian Studios porque te das cuenta de que no hay prácticamente nada que no puedas hacer en el juego por estúpido y surrealista que pueda parecer. Es asombroso a niveles inimaginables. No parece haber límites en esta aventura de rol que por momentos parece un immersive sim al estilo de Dishonored. No lo digo solo yo. "Puedes ver mucho de ello en la ciudad de Baldur's Gate", afirma el jefe de guionistas del juego, Adam Smith, cuya filosofía ha sido crear un escenario en el que puedas dar rienda suelta a tus ideas más descabelladas. "Quiero ser capaz de alcanzar todas y cada una de las ventanas y ver a dónde me llevan". Si tienes que entrar en un edificio, ¿por qué no saltar por los tejados o incluso volar? Lo alucinante es que vayas donde vayas siempre parece haber una forma única de alcanzar tu objetivo.
"Hay muchas maneras distintas de cumplir cada misión, y eso es parte de lo que define a un immersive sim. Así que no sabría decir si somos un RPG con mucho de inmersive sim, o si estamos creando un inmersive sim con el alma de un RPG", explica Adam Smith. Lo que me fascina de Baldur's Gate 3 es que no va de farol cuando promete una libertad de acción sin precedentes. Es aún más grande y complejo que el formidable Divinity: Original Sin 2, que ya es decir; literalmente puedes volar a lo alto de un edificio, convertirte en una nube gaseosa y colarte por los tubos de ventilación para no ser detectado. Pero además es completamente imprevisible. Una conversación con un djinn terminó con un personaje perdido en una selva, solo, rodeado de dinosaurios. Fue tan absurdo y divertido que acabamos riendo a carcajadas. El juego está plagado de momentos así. Hay tantos y los hay tan increíbles que me parece hasta trágico pensar que no veremos la mayoría de estos porque, ya sabes, todo depende de tus elecciones. Pero a la vez siento también una profunda admiración por lo que ha construido Larian Studios.
Es el RPG más RPG que he visto en muchos años
Es el RPG más RPG que he visto en muchos años. Puedes interactuar con prácticamente todo cuanto te rodea. Puedes asesinar a quien quieras, evitar peleas usando el ingenio y el carisma, puedes robar, o ser un santo; puedes ser sutil como un ninja o hacerlo saltar todo por los aires aunque tu misión simplemente fuera matar a un puñado de ratas en una cocina, en un claro homenaje al memorable Baldur's Gate 1. El grado de locura de Larian es tal que hay acciones que pueden desembocar en la muerte de alguno de los protagonistas… ¡cuando apenas los acabas de conocer! Y les da igual dejarte sin horas y horas de esas historias porque estarás escribiendo muchas otras distintas.
Dark Urge es el último Origen de personajes confirmado.
El RPG de fantasía definitivo
Hay algo que no deja de sorprenderme incluso después de todos estos años hablando de Baldur's Gate 3 y es lo mucho que cambia la experiencia de juego dependiendo del grupo de aventureros que te acompañe. Durante tres horas pude probar la clase monje con unas mejoras que lo convertían en una especie de ninja, y se sintió genial. También se ha sumado un nuevo héroe, The Dark Urge, que es absolutamente demencial. Juegas con un psicópata que no parece controlar sus instintos homicidas, así que imagina lo 'divertido' que puede ser ir andando con tranquilidad y que de repente mate a una ardilla de una patada porque sí, porque estaba en su camino. Y no es ni de lejos lo peor que vas a ver si decides encarnar este Origen. Este nuevo trasfondo no está asociado a una raza o clase determinada, por lo que puedes jugar encarnando al tipo de héroe que desees.
No hay prácticamente nada que no puedas hacer en el juego
"Nuestro mayor problema es que tenemos que ser muy listos para asegurarnos de que los jugadores se dan cuenta de todo cuanto pueden hacer", me comentaba el jefe de guionistas. "Esa es la razón por la que hemos dedicado tanto tiempo trabajando en tutoriales, porque los jugadores nos decían 'voy a hacer las cosas simples porque no sé qué más puedo hacer'. Y cuando nos sentábamos con ellos y les decíamos 'haz esto, o prueba esto otro', se quedaban alucinados y era entonces cuando empezaban a improvisar". Creo que este será el mayor reto al que nos enfrentaremos los jugadores. Entender que incluso aquello que parece imposible porque "a ver qué juego te deja hacer eso", puede ser una solución en Baldur's Gate 3. Incluso en el combate puedes ser tremendamente creativo, lo que hace que por muchas batallas que libres nunca sientas que estás repitiendo una y otra vez la misma pelea.
Lo cierto es que el juego resulta abrumador. Hay tantos hechizos, tantas habilidades y tantas formas de combinarlo todo que da vértigo, pero es maravilloso comprobar cómo todos estos sistemas funcionan tan bien juntos. El director creativo de Baldur's Gate 3, que es todo un showman, nos demostró una y otra vez lo increíblemente locas que pueden ser las peleas en este universo de D&D. Puedes hacer que los enemigos bailen estúpidamente, puedes invocar criaturas del más allá; disfrazarte para engañar a los rivales, bloquear puertas con hechizos arcanos para evitar que te persigan, o puedes transformarte en imponentes bestias, acuchillar o disparar flechas desde las vigas de un techo como si estuvieras en el imprescindible Thief, que curiosamente es uno de los juegos favoritos de Adam Smith. "Uno de mis grandes momentos en juegos de fantasía lo viví en los primeros niveles de Thief, cuando empiezas a descubrir tus herramientas y te das cuenta de la cantidad de cosas que puedes hacer", explica. Y hay mucho de eso en lo nuevo de Larian Studios.
Habrá romances en Baldur's Gate 3
Además cada pequeña decisión que tomas; cada acción que llevas a cabo por insignificante que parezca tiene consecuencias en el mundo que te rodea. Hay incluso un periódico en Baldur's Gate 3 que se actualiza con tus gestas y fechorías; y dependiendo de lo que digan de ti la gente reaccionará de una forma u otra bien distinta. Hasta ese punto llega el nivel de inmersión de un RPG que no se olvida tampoco de los romances. Vimos una escena entre el héroe y una de las últimas incorporaciones al grupo de aventureros, que cuenta también con una de las historias más tristes del juego. Y a pesar de ello, no pierde la sonrisa, lo que nos regaló una escena enternecedora y también divertida por las decisiones que fuimos tomando. En este sentido, pregunté al guionista jefe por el humor que está tan presente en los juegos de Larian y para él es fundamental.
"Es algo natural en la escritura. El juego es muy largo, así que no quiero que tenga un único tono. Si fuéramos implacablemente oscuros durante toda la aventura creo que sería demasiado para el jugador. Así que hay que encontrar algo de luz, comedia y alegría. Algo que, como escritor, también me parece lo más honesto. En un día puedo tener miedo, puedo estar feliz, también triste y luego divertirme. Así que en esta aventura, los personajes van a pasar por el mismo tipo de emociones".
La ciudad de Baldur's Gate se ve gloriosa.
Mi partida llegó hasta el inicio del Acto 2, que hasta la fecha ha estado oculto, y esto no hizo sino confirmar lo inmenso que es el juego y lo increíblemente abierto que es su diseño de niveles. Parece algo de otro universo, pero no es más que el duro trabajo de cerca de 400 desarrolladores que han puesto todo su corazón en este ansiado regreso de Baldur's Gate. En este sentido, Adam Smith me confirmó que los guionistas trabajan junto a los diseñadores de niveles para dar vida a todas esas misiones tan divertidas, sorprendentes y espectaculares de las que puede presumir el juego. "Se necesita mucha gente. Se necesita mucho talento. Y se necesita mucho dinero. Así es. Y mucho tiempo también", me contaba al hablar de todo el trabajo de escritura que hay tras cada misión, por insignificante que esta pueda parecer. "Si te digo que explores algo porque hay un tesoro allí, necesito contarte por qué lo sé, y por qué tendrías que ir allí, y qué razones hay para que alguien ocultara allí lo que sea que ocultaron". Visto así, se entiende que el juego tenga "más del triple del diálogo de las tres novelas de El Señor de los Anillos juntas". Es que además, una misma misión puede cambiar una barbaridad.
Como han mostrado en el último panel sobre el juego, llega al punto de permitirte colaborar con los villanos masacrando a los buenos… o ir con los buenos pero actuar como el mayor bastardo de los Reinos Olvidados. ¿Por qué no convences a alguien para que se deje acuchillar hasta la muerte? Es que como te decía, el juego es tan loco y a veces es tan cruel, que no tiene límites. Y es algo que me alucina. Por eso estas tres horas con él me han hecho sentir la necesidad de jugar ya a la versión final, que contará además con más opciones de personalización y algunos ajustes que prometen llevar la experiencia Baldur's Gate 3 a un nuevo nivel de excelencia. También he tenido la oportunidad de probarlo en PlayStation 5 y la verdad es que el juego, aunque pierde algo de detalle con respecto al PC, funciona francamente bien en la consola de Sony. Hay algunos tirones, pero precisamente una de las razones para retrasarlo unos pocos días tiene que ver con la revisión de todos estos problemas técnicos. En cuanto al sistema de control, la verdad es que la interfaz es bastante cómoda y enseguida te haces a la experiencia D&D con un mando entre las manos.
No puedo negar que me muero de ganas por seguir jugando a Baldur's Gate 3. Tenía las expectativas altas pero tras ver todas las novedades que Larian ha presentado, y tras charlar con ellos acerca de su trabajo, tengo clarísimo que estamos ante un videojuego verdaderamente especial. Es un RPG inmenso; tan grande que asusta, pero no por la extensión de sus mapas, que son enormes, sino por la densidad de contenidos que se han reunido en torno a cada localización. Mires donde mires y vayas donde vayas hay una gran historia que descubrir, con cerca de 180 horas de juego si decides tomártelo con calma. Es una locura, pero bendita locura. En apenas unas semanas puede que tengamos entre manos no solo uno de los mejores juegos del año sino también, uno de los mejores RPG de la historia. ¡Que así sea!
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