Con una competición bastante igualada y con un gran nivel en los equipos, Valorant ha logrado que su esport sea prácticamente impredecible y que no haya un claro dominador (a excepción de Gen.G que está siendo el más regular). Sin embargo, todo esto se ve opacado por el formato de competición que ha optado el shooter de Riot Games, y que claramente perjudica a que haya un gran espectáculo.
Sin prácticamente tiempo para descansar (y con un vuelo largo de por medio), Team Heretics se juega desde la semana que viene sus aspiraciones a clasificar a la Champions de Valorant, o lo que viene a ser lo mismo, el mundial de este título. Las críticas en la comunidad se han hecho notar en redes, ya que habrá un largo parón sin competición cuando acabe este mundial de muchos meses, por lo que podían haber alargado un poco más el descanso de los jugadores para darles tiempo para tomarse un respiro, entrenar con calma y evitar ese clásico burn out que tienen muchos profesionales.
Heretics fue top 2 de EMEA en las dos fases
Los herejes son el gran damnificado de este formato viendo su trayectoria este año tanto en EMEA como en eventos internacionales. En la competición doméstica ha sido subcampeón en las dos ocasiones, en esta última Masters fueron segundos quedándose a un mapa de lograr tal hazaña, y se marchan de tierras asiáticas con cero puntos. Por sorprendente que parezca, no ha sacado puntos suficientes como para encarar su clasificación al torneo, y en estos instantes están terceros (empatado a puntos con FUT Esports), por lo que prácticamente necesita acabar entre los tres primeros si quieren disputar el último evento de 2024.
Personalidades del sector como Lucas Rojo, califican esto de vergüenza: "Que Heretics después de haber quedado top 2 no tenga puntos de Champions y juegue dentro de 1 semana es para coger a los que ponen las fechas de los torneos y soplarles al oído fuertemente. Menuda vergüenza de formato. Luego que si la gente se quema. No me jodas". Esto, sin lugar a dudas, debe hacer reflexionar a Riot Games al respecto, no solo porque se pueda quedar Heretics fuera, también porque va a haber equipos que apenas jueguen diez partidos en un año competitivo y por el que los clubes tienen que hacer un alto desembolso en salarios o en una gaming house en Berlín.
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