A todos nos ha pasado: entras a un videojuego de peleas por primera vez y, a los pocos minutos en el online, te encuentras con un jugador que, simple y llanamente, barre el suelo con tu cara. Los fighting games pueden ser difíciles de empezar a dominar, pero la industria cada vez está virando hacia barreras de entrada más accesibles. Granblue Fantasy Versus: Rising, lo nuevo de Arc System Works es otra prueba de ello, pero también es mucho más que "un juego de peleas fácil". Tras haberme sumergido en su mundo de anime y fantasía medieval, toca hablar de un título complicado que viene a saldar deudas pendientes, pero que queda en una posición difícil.
Lo que empezó como un juego para móviles estilo gacha se ha convertido en una gran franquicia
Pero, ¿qué es Granblue Fantasy? Lo que empezó como un juego para móviles estilo gacha se ha convertido en una franquicia por todo lo alto. Con ya dos juegos de peleas, un RPG firmado por PlatinumGames en camino y dos temporadas de anime, está claro que Cygames tiene grandes planes para este curioso universo, y se está apoyando en grandes de la industria del videojuego para ello. Con los creadores de Dragon Ball FighterZ y Guilty Gear, este es el segundo videojuego de peleas de la franquicia… Más o menos.
Verás, en marzo de 2020 llegaba a nosotros Granblue Fantasy: Versus, un fighting game más que vistoso que ya analizamos en 3DJuegos. Pese a entrar por los ojos y tener mucho que ofrecer, las asperezas del título no tardaron en notarse: la falta de contenido, los extras insustanciales, el modo historia más tedioso que entretenido, montones de DLC y la falta de rollback netcode hicieron de este título un suceso más agridulce que la celebración que debía ser. Ahora, tres años y medio después, me alegra decir que esta vez es la buena.
Granblue Fantasy Versus: Rising es mitad secuela, mitad expansión de lo que ya vimos en el videojuego de 2020, y viene con una propuesta ambiciosa: no solo arreglar los errores del pasado, sino también cerrar el año con uno de los videojuegos de peleas más accesibles y variados de la generación. Pero, ¿lo consigue? Esta es una pregunta más compleja de lo que pueda parecer, y es que Cygames se ha puesto a sí misma entre la espada y la pared gracias a la manera en la que han abordado la saga dentro del ring.
Un plantel de personajes variado y equilibrado
Evidentemente, a la hora de hablar de un contenido con diversidad dentro de este género, tenemos que empezar dirigiendo la mirada hacia su plantel de personajes. Si el primer GBF Versus empezó sus andadas con la mísera cantidad de 11 luchadores —por muy bien diferenciados que estuvieran—, Rising más que duplica este plantel para estrenarse con 28 personajes. Esta es la primera señal de que la semi secuela quiere enmendar los errores del pasado, aunque hay un detalle a considerar. De todos esos nombres, solo hay 4 que no estuvieran en la anterior entrega, dejándonos con Anila, Siegfried, Grimnir y Nier —que nada tiene que ver con el reciente anuncio del cameo de 2B en el juego—. Esto no es ni bueno, ni malo, pero es una prueba más de la problemática de que este título esté en el limbo entre secuela y expansión. Si has comprado todos los DLC del juego anterior, posiblemente sientas que se te ha dado de lado, pero si eres primerizo, hay muchos personajes muy interesantes que disfrutar.
En cuanto a la variedad de estos, es uno de los puntos más fuertes del título. Tienes un plantel robusto, equilibrado y muy divertido de usar para todo tipo de jugadores. Las diferencias de movimientos —e incluso formas— de todos los luchadores hacen que siempre haya algo para todos los estilos: shotos, zoners, grapplers, titiriteros… Hay un poco de todo y mucho lugar para la experimentación y la diversidad de tácticas. En cuanto a las diferencias de poder entre personajes, es pronto para hablar de ello, pero, aunque siento que hay algunos mejores que otros, no he notado ningún luchador que "esté roto". Eso sí, sí que me he encontrado con que Siegfried puede ser perfecto para los novatos, pero también para acabar con ellos. Hablando de esto, si eres nuevo en el género, ¡tengo buenas noticias para ti!
Novedades jugables suculentas para combates sin piedad
El sistema de controles simplificados te deja acceder a los movimientos especiales de cada personaje con un toque de R1 más inputs direccionales, descartando así las complicadas medialunas tradicionales del género. Si te preocupa, eso sí, quedar en desventaja como veterano, debes saber que los controles simples ofrecen menos daño que los originales (un 10%), y dan menos control sobre los movimientos de los personajes, pues no permiten acceder a variantes con diferencias de velocidad y poder. Yo, personalmente, no he tenido problemas usando los controles "de toda la vida", y aplaudo la inclusión de un modo más fácil.
Esta no es la única novedad, sino que hay que poner el foco en las Ultimate Skills y los Bravery Points, dos de los pilares fundamentales de Rising. La primera de estas es un ataque especial fortalecido que utiliza el 50% de tu barra de especial, pero que hará más daño. Por otro lado están los Bravery Points, un nuevo recurso gracias al que podrás activar mecánicas como Raging Strikes —un golpe que rompe bloqueos—, o Brave Counters —un potente contraataque que ejecutarás desde la defensa, permitiéndote salir de situaciones en las que estás atrapado ante la presión de tus rivales—. En cada ronda, los jugadores empiezan con 3 Bravery Points, los cuales serán perdiendo y ganando en el flujo de la pelea, obligándote a pensar en ellos como un elemento táctico a priorizar y usar con cabeza.
En cuanto a elementos que no son únicos de Rising, pero que sí que me han encantado, está el hecho de que las habilidades tengan tiempo de recuperación para poder usarse. Es decir, no puedes estar spammeando el mismo movimiento 20 veces seguidas, pues vas a necesitar que este deje de estar en cooldown para poder repetirlo. Vas a necesitar aprender a usar todos tus recursos si quieres triunfar en el ring —especialmente en el modo online—.
También hay contenido fuera del ring, ¡y mucho!
Para un universo tan trabajado como el de Granblue Fantasy, el modo historia es una oportunidad de oro, aunque sea algo que solemos obviar en los videojuegos de peleas. Este apartado es una de las principales pruebas de que estamos ante un videojuego a medio camino entre la expansión y la secuela, y es que toda la historia que apareció en el Versus original está aquí, con un acto extra que es su conclusión y el añadido exclusivo que Rising tiene que ofrecer. Eso sí, este viene con un cambio mecánico importante: la desaparición de los elementos de RPG, los cuales no aportaban gran cosa a la experiencia en la primera entrega del juego.
Lamentablemente, al hacer esto lo que queda es básicamente una novela visual con algunos combates y escenas de vídeo —de las cuales ojalá hubieran más—. que, quitando los encuentros de jefes, se enmarcan jugablemente como fases de beat 'em up. Si bien siempre he querido que el universo de GBF se convierta en "algo más" a través de sus experiencias jugables fuera del gacha, en un año donde hemos viajado a Metro City para resolver misteriosos sucesos en Street Fighter 6, luchado a muerte en la mejor película de Mortal Kombat hasta la fecha, y saboreado la epicidad más grande con los primeros compases de Tekken 8, no puedo evitar sentir que el flujo de pasar texto, entrar en algún combate y volver al texto se queda lamentablemente corto.
Si a esto le sumamos una trama que no me ha llegado a encantar por ser demasiado formulaica en algunos aspectos y tristemente apresurada en otros, nos quedamos con un modo historia que sigue sin saber cómo conquistar, aunque al menos ahora lo intenta con menos tedio. No será en la bilogía de Versus donde Granblue alcance este portento narrativo que quiero, eso me queda claro.
Si lo que estás buscando es algo más desenfadado, ¡Versus Rising también te tiene cubierto! Puede que parezca que está completamente fuera de lugar, pero el modo Grand Bruise Legends trae la locura y la diversión del mismísimo Fall Guys a Granblue Fantasy. Con pruebas llenas de obstáculos a conquistar, esta diversión con sabor arcade te deja competir con otros jugadores en busca de recompensas variadas, como colores secundarios para tus personajes, armas y avatares. No añade mucho, eso es verdad, pero es el tipo de contenido secundario con encanto que da gusto ver aquí. Si quieres más elementos secundarios, ¡hasta tienes un modo foto en el que hacer posar a tus personajes!
El combate online es simplemente exquisito
Por suerte, esta obsesión por construir elementos secundarios con encanto también está extrapolada a uno de los pilares del título: los combates online. Atrás quedaron los lobbies que eran poco más que una interfaz llena de nombres, ahora lo que se lleva es crear espacios tangibles para la socialización, y pocos han entendido tan bien esto como Arc System Works. Cuando entres a jugar por internet, serás transportado a una sala llena de recreativas —parecido a como pasaba en Street Fighter 6—, donde, además, hay lugar para pegar saltos con los otros jugadores, conseguir recompensas usando las típicas máquinas de ganchos de las recreativas, resolver puzzles de plataformeo para encontrar detalles graciosos en estos escenarios, e incluso canchas para jugar al fútbol. Esto no aporta mucho al juego en línea, evidentemente, pero sí que hace algo más importante de lo que pueda parecer: dar sensación de comunidad.
Lo que sí que es importante para las partidas por internet es el añadido de rollback netcode, algo que faltaba en el Versus original, y por lo que este fue duramente criticado. El sistema que busca "eliminar" el lag a través de la predicción de movimientos funciona de maravilla en Versus Rising y, al menos en PC, ha hecho que mis partidas se sintiesen suaves como la seda y sin ningún tipo de problemas, algo que es imprescindible en un ambiente competitivo como el que busca crear Arc System Works con este título.
Puedes jugar a Granblue Fantasy Versus: Rising gratis… más o menos
Para alimentar esa comunidad, está claro que lo primero es tener jugadores, y Cygames ha optado por un movimiento brillante para conseguirlos: la creación de una versión free-to-play del juego. La edición gratuita te permite probar el juego sin límite de tiempo, aunque sí con barreras de contenido. La manera en la que funciona es que siempre podrás tener a Gran como personaje jugable, pero cada semana habrá una rotación de 3 luchadores para poder probar. A esto, además, hay que sumarle que podrás probar la parte 1 de la historia, unirte a partidas online (lobbies incluidos) y jugar al modo arcade del título. Está claro que hay muchas limitaciones para quienes se descarguen la Free Edition de Granblue Fantasy Versus: Rising, pero, como primer paso dentro de este título, es una jugada maestra dejarte participar sin pagar un solo céntimo.
Como adicto a los combates online, veo una base robusta y con el potencial de abrirse un hueco entre los grandes
Entonces, ¿en qué quedamos? ¿Han conseguido Arc System Works y Cygames redimir uno de sus videojuegos más polémicos? Para mí, sí, pero todo depende de a quién le preguntes. El problema obvio de este medio paso entre secuela y expansión es la posible fragmentación de una comunidad ya enfadada. Sin un descuento que permita actualizar del Versus original a Rising, los jugadores más veteranos quedan en una posición incómoda: atrapados en un juego destinado a morir y obligados a pagar 50 euros para pasar al siguiente título.
Si no es tu caso, Granblue Fantasy Versus: Rising es una experiencia 100% recomendable. Con montones de contenido, una acción absolutamente bestial y frenética, posiblemente la mejor estética que haya visto en un fighting game en años y una barrera de entrada nimia, hay muchísimo que recomendar aquí. Sí que es verdad que el modo historia me ha decepcionado, pero, como jugador adicto a los combates online, lo que veo aquí es una base robusta y con el potencial de abrirse un hueco entre los grandes. Ahora, como de costumbre, todo depende del soporte que se le dé al título y a su comunidad, pero desde luego que este título va por buen camino.
Granblue Fantasy Versus: Rising toma nota de los fallos de su primera parte y redirige la obra de Arc System Works hacia una fórmula ganadora. Con mucho contenido, un sistema de control accesible (pero no por ello carente de profundidad) y encanto por todas partes, es un buen juego de peleas incluso si no eres fanático del universo de Granblue Fantasy. Con la llegada de Relink el año que viene, si eres fan del género puede ser el aperitivo perfecto antes de que se estrene uno de los action RPG más esperados de los últimos años.
- El sistema de controles simplificados lo hace ideal para jugadores primerizos.
- Su plantel inicial es de 28 personajes, pero ya hay 5 luchadores de DLC planeados.
- El modo historia ha pasado de ser un RPG a adoptar el formato de novela visual.
- Los luchadores están bastante bien equilibrados, aunque hay algunos que destacan por encima de otros.
- Cuenta con rollback netcode para una mejor experiencia online.
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