De un tiempo a esta parte, la Nintendo eShop ha pasado de ser una plataforma de escasas ofertas relevantes, a llenarse de auténticas gangas. Por eso de vez en cuando me paseo por los interminables listados para tratar de encontrar alguna joyita a precio irrisorio. Y de vez en cuando cae algo. En esta ocasión, me ha ocurrido con Limbo (0,99 euros) e Inside (1,99 euros), dos juegazos que simplemente no puedes perderte, y menos aún si no has tenido la ocasión de probarlo.
Se trata de los dos únicos juegos lanzados por la compañía danesa Playdead, y que actualmente se encuentra trabajando en su próximo proyecto, el cual de momento se sabe que estará centrado en la ciencia ficción y que abandonará el espíritu 2D de los anteriores juegos para centrarse en una perspectiva 3D. Puede que no te interese conocer estos datos, pero creéme que tu mente cambiará cuando juegues a los que son ya dos clásicos del género plataformero.
Limbo e Inside, dos joyas atemporales
Recuerdo que la primera vez que vi Limbo fue en el E3, exhibiéndose junto a otros grandes como Halo: Reach, Fable 3 y Dead Rising 2. El stand estaba prácticamente vacío, pero a mí me llamó la atención. Siempre he sentido interés por los estilos artísticos fuera de lo común, y este juego, cuando lo veías, te dabas cuenta de que desprendía un aura especial. Luego me di cuenta de que el misterio detrás de su técnica de claroscuro estaba en consonancia con la soledad del protagonista y lo a veces terrorífico que resultaba.
La identidad visual de Limbo es sorprendente
Limbo es la historia de un niño buscando a su hermanita en un bosque decrépito y repleto de peligros. No hay narración alguna, ni siquiera voces. Es una aventura minimalista, pero tremendamente expresiva. De hecho, aunque solo contemos con las acciones de saltar y tirar de objetos, el juego se las apaña para proponer una increíble variedad de situaciones y puzzles. No es extraordinariamente difícil, pero tampoco un paseo, y sus aproximadamente 4 horas de duración os aseguro que no se hacen cortas.
Otro detalle es que todo el juego está en blanco y negro. Y diréis: ¿cómo? Pues sí, sorprendente, como también lo es el hecho de que consigue meterte en su relato de pesadilla, con un diseño muy inteligente en que sientes el peligro de morir a cada paso que das. Ese es uno de los grandes méritos de un videojuego que en cuanto a ambientación tiene muchas lecciones que dar a la mayor de juegos existentes. Grandioso.
La acción de saltar y empujar eran suficientes para una jugabilidad sobresaliente
Inside no se queda atrás. Es más, en muchos aspectos supone una evolución con respecto a la anterior entrega. Aquí el planteamiento es distinto, pero igual de interesante: acompañamos a un niño en una huida hacia adelante, con una intriga continua, permanente, en que cada situación supone una nueva sorpresa. Cuando salió, pensé que era difícil que la compañía se superase, pero vaya si lo hicieron, y además con un mensaje que cala hondo una vez que dejas el controlador sobre la mesa.
El suspense marcado por un avance plataformero, con puzles interesantes, se acompaña otra vez de un apartado artístico único, en esta ocasión tal vez con menor identidad, pero con mayor variedad de escenarios. Esto ayuda a construir una mejor sensación de viaje, otra vez de unas 4 horas, aunque suficientes para sustentar un videojuego minimalista, con momentos de terror y una dificultad perfectamente ajustada.
Inside era otra cosa, pero mantenía las claves originales y las llevaba a un nuevo nivel
Así que ya lo sabes, si no los habías jugado, nunca es tarde, ya que además son títulos perfectamente disfrutables en una Nintendo Switch. Dos auténticos juegazos que simplemente tienen que estar en tu biblioteca, imprescindibles según la redacción, y que encima se encuentran actualmente a un precio de escándalo.
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